Una emotiva Misa del Gallo se llevó a cabo en la Catedral de Talca, donde cientos de feligreses llegaron a las 22:00 horas a participar de la liturgia en la que predomina el amor y la fe.
La misa de Nochebuena, celebrada en numerosas catedrales de todo el mundo la noche del 24 de diciembre, volvió a ser una tradición en la capital regional, la que fue presidida por el Obispo de Talca, Monseñor Horacio Valenzuela, él que llamó a la unidad y al perdón.
Mencionar que es la octava Misa del Gallo que participa el alcalde Juan Castro, quien manifestó que “siempre he pensado que lo primordial en estas fechas es estar reunidos con los seres queridos, ya que es un momento para demostrarle a nuestras familias el amor y respeto que sentimos por ellos, ya que creo que no existe un mejor regalo, porque estos son los gestos son los que llenan el alma y dan fuerza cada día para ser mejores personas”.
Sandra Ávila una de las asistentes expresó que, “para las personas cristianas este tipo de ceremonia rescata el real sentido que tiene la Navidad, es por esto que vengo todos los años con mi familia y le inculcó a mis hijos que hoy nació Jesús y eso es lo realmente significativo”.
A la ceremonia llegaron cientos de creyentes, quienes pudieron disfrutar de los villancicos de Noche de Paz y como de costumbre al terminar la ceremonia, el niño Jesús fue puesto en los brazos de la virgen María por el alcalde y el Obispo de Talca.
